OJOS DE SU

VIDDASU

“A lo lejos siempre observo como aletea. Vuela por los cielos con una sagacidad que solo Siddartha entendería. Su en cualquier tipo de manifestación es desde la Luz hasta la intimidación. Es el espíritu supremo creador del aliento que es la vida. Y nos permite existir y experimentarnos. En nuestros barcos cocinamos deliciosos cortes y los felinos nos cuidan por supuesto. Pero no por eso olvidaremos de agradecer al Gran Su. No me alcanzará esta vida para expresar gratitud que se merece pero igual agradezco ahora...Después de la visita del gran Dorado nos queda clara la compañía y el cuidado. Honestamente es suprema la presencia. Le deseo a los humanos que se preparen para cuando les toque ser testigo de aquello que podemos llamar como Presencia Espiritual De Dios. Me receto aprender a interpretar el Tarot de mi vida, tocar el ukulele sagrado que los dioses me dieron hace años, escribir la existencia de esta existencia y aportar en el pro del proyecto de la creación. Es conocido que las personas llegarán y debemos ser discretos pero concretos. Expresemos palabras de amor para entender nuestra limitante egoica. Salgamos de la caverna platónica y meditemos en la mañana con los cantos de María Elena. Recuerdos, música y mucho amor. Arde cualquier alma desde lo alto cuando no tienes un sitio para sentarte en silencio a observar las cascadas que tienes en frente. Las luciérnagas corren sin cansancio esperando por nuestra iluminación. Trompetas y clarinetes se mezclan en el ambiente en el momento exacto donde el Genesis se empezó a escribir. De eso se trata toda esta vida. De sonar fuertemente las campanas del cielo y de esperar la bajada de los carros de fuego.”

Acrílico

50 x 30 x 2 cm

Pintura