Día de muertos

Esta obra, creada por el fotógrafo y artista Manu Roldán, es una potente representación de la fusión entre la tradición y lo sobrenatural. La figura central, adornada con un maquillaje de catrina, un símbolo icónico del Día de Muertos, transmite una mezcla de solemnidad y misterio. Su mirada roja intensa destaca como un elemento perturbador y fascinante, evocando emociones de inquietud y atracción.

El contraste entre la delicadeza de los detalles florales en el sombrero y los tonos oscuros que dominan la composición genera un equilibrio visual que atrapa al espectador. La cruz difusa en el fondo y las luces cálidas sugieren un contexto de ritual y trascendencia, uniendo lo terrenal con lo espiritual. La textura de las sombras sobre el velo añade una capa de profundidad y simbolismo, como si el tiempo y el espacio se desdibujaran en este retrato.

Esta pieza destaca como una representación contemporánea de un tema ancestral, logrando reinterpretar la tradición con una estética moderna y cautivadora. Ideal para coleccionistas y galerías que buscan obras cargadas de simbolismo, tradición y un toque de surrealismo visual.